El Emergente
Por Ignacio Serrano
Pasa siempre. Cuando Maltín Polar organizó una votación popular para seleccionar al equipo venezolano del siglo XX, Baudilio Díaz quedó por encima de Guillermo Vento, Dalmiro Finol no apareció y hasta Kelvim Escobar se coló por delante del Carrao Bracho entre los lanzadores.
La fanaticada tiene mala memoria, sobre todo allí donde no se cultiva la historia. Y el nuestro es un país donde la historia se cultiva poco y mal. Beisbolísticamente hablando, eso se traduce en una afición con memoria de corto plazo.
La oficina del comisionado de las Grandes Ligas llevó a cabo una encuesta por internet entre seguidores de la pelota, para seleccionar a los cuatro peloteros más representativos de cada franquicia. Los resultados fueron dados a conocer el martes, antes de iniciarse el Juego de Estrellas. Cuatro criollos fueron citados. Ninguno se llama Luis Aparicio.
Omar Vizquel fue ubicado entre los grandes de Cleveland, Andrés Galarraga fue uno de los más votados en Colorado, Félix Hernández en Seattle y Miguel Cabrera en Detroit.
¿Faltó algún otro nativo?
Víctor Davalillo, Francisco Rodríguez, Víctor Martínez, César Tovar, Johan Santana, Alfonso Carrasquel, Bob Abreu, Edgardo Alfonzo, Magglio Ordóñez, Ramón Hernández, Wilson Álvarez Manny Trillo, Freddy García, Carlos Zambrano y Oswaldo Guillén son nombres imprescindibles en los anales de la pelota local. Pero es difícil considerar que fuera una injusticia su ausencia en este llamado Franchise Four.
Víctor Davalillo, Francisco Rodríguez, Víctor Martínez, César Tovar, Johan Santana, Alfonso Carrasquel, Bob Abreu, Edgardo Alfonzo, Magglio Ordóñez, Ramón Hernández, Wilson Álvarez Manny Trillo, Freddy García, Carlos Zambrano y Oswaldo Guillén son nombres imprescindibles en los anales de la pelota local. Pero es difícil considerar que fuera una injusticia su ausencia en este llamado Franchise Four.
Dos venezolanos, sin embargo, quedaron fuera, teniendo merecimientos para ser considerados con fuerza: Luis Aparicio y David Concepción.
Lo de Concepción era de suponerse. Los cuatro de Cincinnati son indiscutibles (Joe Morgan, Johnny Bench, Pete Rose y Barry Larkin, cuatro miembros del Salón de la Fama ). Y por fuera quedaron legítimos astros, como Tany Pérez y Frank Robinson.
Lo de Aparicio, en cambio, no se entiende, salvo por la edad media que pudieran tener los votantes en Chicago. ¿Frank Thomas? Está bien, acaba de recibir un puesto en Cooperstown. ¿Minnie Miñoso? Discutible, aunque es un favorito de la organización. ¿Harold Baines? ¿Paul Konerko? ¿De veras?
No se trata de defender al zuliano y ya. El mejor pelotero de todos los tiempos en esa franquicia posiblemente sea Luke Appling y no fue seleccionado. Tampoco Nellie Fox, el compañero del marabino, emblema junto a él de toda una época en las mayores, la de los Go-Go Sox.
Eddie Collins, Ed Walsh, Eddie Cicotte, Billy Pierce, incluso Joe Jackson o Carlton Fisk tuvieron mayor impacto en sus épocas y casi todos están en Coopewstown, salvo Cicotte y Jackson, marginados debido al escándalo de los Medias Negras.
Que los aficionados de los Yanquis resistieran la tentación de incluir a Derek Jeter, de más reciente imagen, para no sacrificar a Babe Ruth, Lou Gehrig, Joe DiMaggio o Mickey Mantle dice mucho de la perspectiva histórica de esa legión.
Pero ver que Mike Trout fue favorecido en Anaheim, a los 23 años de edad, o que tantos históricos quedaron fuera en Chicago, incluyendo a Aparicio, resulta cuando menos desconcertante.
Sorprende incluso si se tiene en cuenta el recuerdo de Kelvim Escobar desplazando en votos al Carrao Bracho y toda su generación.
Publicado en El Nacional, el jueves 16 de julio de 2015.