“Parece que Brandon sigue con nosotros”, declaró Price, aludiendo los intentos del equipo escarlata por enviar al veterano a otra divisa. “Para mí, sigue siendo un camarero de gran valor y talento. Es difícil entregarle su posición a otro más”.
El alto mando de la novena pactó dos cambios por Phillips en el receso invernal, primero con los Nacionales de Washington y luego con los Diamantes de Arizona. El intermedista vetó ambas transacciones.
El astro de los Rojos tiene el derecho de aprobar o rechazar cualquier acuerdo que le envíe a otra divisa, debido a que ya tiene más de 10 años en las Grandes Ligas y 5 continuos con el mismo club.
Cincinnati quiere que Peraza sea el segunda base en 2016, luego de adquirirlo en un convenio con los Dodgers de Los Ángeles. El llanero es uno de los principales prospectos en su nueva organización y ocupa la sexta plaza entre sus compatriotas en el escalafón de MLB.com.
Los escarlatas han emprendido una drástica restructuración en la pausa entre torneos, pero tampoco han definido todavía el papel del otro venezolano que forma parte del equipo grande, Eugenio Suárez, quien cubrió de buena forma la ausencia por lesión del campocorto titular Zack Cozart, el año pasado.
El gerente general Walt Jocketty dijo al Enquirer que considera a Peraza capaz de abrirse paso en la intermedia esta misma zafra.
“Queremos que juegue tanto como sea posible”, admitió Price. “Y también sé que han tratado de cambiar a Brandon durante todo el invierno. Sin embargo, eso no ha ocurrido y yo no veo a Brandon como un jugador de la banca”.
Ignacio Serrano
Publicado en El-Nacional.com, el martes 2 de febrero de 2016.