El Emergente
Por Ignacio Serrano
¿Estamos ante el Jugador Más Valioso entre los venezolanos en esta primera mitad de temporada? ¿Puede el carabobeño aspirar a la máxima distinción del joven circuito, de seguir así, al finalizar el campeonato?
La actuación de Pérez es notable. Bajo ciertos criterios, podría perfectamente ser el Más Valioso, especialmente entre aquellos que consideran que “valioso” se traduce en esa intangible evaluación sobre el impacto de un pelotero en el terreno y en la cueva de un equipo ganador.
Ese criterio es tan válido como el que considera que “valioso” se traduce en los números de más valor, dado que el único modo objetivo de evaluar un desempeño es con estadísticas.
Lo uno y lo otro es respetable. Este columnista prefiere lo segundo, pero otorga crédito a quienes gusten de lo primero.
La cosecha de Pérez es destacable, se aplique el criterio que se aplique. Su producción ofensiva ha empujado a los Reales. No tiene tantas impulsadas (38, con proyección de 73), pero es receptor, lo que da doble importancia a su aporte.
Por un lado, porque un catcher es corresponsable de lo que haga su pitcheo. Por otro, porque el gasto físico de estar agachado nueve innings cada día roba parte del potencial ofensivo y hace que resulten raros los caretas con 15 vuelacercas a mitad de justa, especialmente en estos tiempos con controles antidopaje.
Pérez sólo ha cometido un error. Su capacidad de éxito ante los corredores rivales ha bajado y se ubica en 34 por ciento, aunque todavía por arriba de la media de la liga. Batea para .267 y tiene .736 de OPS.
El lento inicio de Víctor Martínez, Pablo Sandoval, Carlos González y José Altuve reduce la lista de adversarios del nativo de Valencia, al buscar al Jugador Más Valioso entre los venezolanos de esta primera mitad. Pero a él y a los demás les ha tocado una lucha desigual: competir con Miguel Cabrera.
El aragüeño es el mejor bate criollo de todos los tiempos y, lesión aparte, está en una de las mejores cosechas de su vida. Es líder de la Americana en average (.350), promedio de embasado (.456) y OPS (1.034). Tiene 15 bambinazos, 54 remolques y .578 de slugging.
El WAR de Baseball Reference sirve para ponerlo en contexto. Pérez tiene 2.1, Altuve 2.2 y Cabrera… 4.0, prácticamente el doble.
No olvidemos que el WAR toma en cuenta todo, incluyendo la defensiva, y da privilegio a los números ofensivos conseguidos por jugadores de la línea central.
El OPS ajustado es otro espejo brutal, al contrastar el OPS de cada jugador con la media de la liga. Pérez tiene uno por ciento por debajo del promedio; Cabrera está 85 por ciento por arriba.
Lo dicho: es injusto compararse contra el mejor madero en la historia de nuestra pelota.
Ambos competirán por el galardón al finalizar la campaña, en caso de mantener el paso y regresar pronto de su lesión el inicialista de Maracay. Por ahora, Cabrera es nuestro Más Valioso, con perdón de quien está en camino a ser el mejor catcher de beisbol.
Publicado en El Nacional, el domingo 12 de julio de 2015.