El Emergente
Por Ignacio Serrano
Uno de los equipos con más grandeligas en 2015 y mejor importación a comienzos de temporada se encuentra en zona de eliminación, al comenzar el último mes de la eliminatoria.¿Qué pasa con los Leones? ¿Mala suerte? ¿O el vendaval les encontró con las ventanas abiertas?
Caracas comenzó fuera de la zona de playoffs esta novena semana de la eliminatoria, con sólo 8 puntos acumulados, en el séptimo lugar.
Cerraron la octava semana con 22 ganados y 22 perdidos. En el viejo sistema, eso sería válido para el quinto lugar, a sólo dos juegos y medio de la punta. Sin urgencias. Tendrían tres juegos y medio por encima de los Bravos, que ocuparían la séptima plaza.
En el nuevo orden, los capitalinos están contra la pared, como todos los clubes que terminaron la primera mitad de la quinta casilla hacia abajo. El único modo de escapar al apremio con este sistema mexicano es tener una vigorosa segunda parte, como ha sido el caso de Margarita. El peso de los puntos de la fase inicial es enorme.
En este panorama ocurrió la migración de Félix Pérez, Henry Urrutia y Jesús Aguilar, el corazón ofensivo.
Pérez tomó una decisión personal: buscar un pacto en Japón que asegure su vida.
Urrutia venía por medio campeonato. Estaba en los planes su ida. Pero se suponía que Aguilar se quedaría todo diciembre. Estaba en sus manos seguir o no.
Una parte de la afición apunta por esto al alto mando. Es de entender que lo hagan, aunque en los tres casos parece que no había forma de lograr algo distinto.
Hay algo más preocupante. Sólo Magallanes tuvo más grandeligas que su eterno rival en 2015. Sin embargo, Jhoulys Chacín es hoy el único de esos 17 felinos en el roster activo.
Aragua, por ejemplo, cuenta con 9 bigleaguers. Y el décimo, Avisaíl García, ya está entrenándose. Los turcos llegan a seis esta semana, con el regreso de Jesús Sucre y el arribo de Ezequiel Carrera y Tomás Telis.
Es verdad que son tiempos duros. Dos terceras partes de la embajada nacional en la MLB ha decidido ausentarse, tal vez para no hacer colas en los mercados o por la inquietud que causa la crisis venezolana. ¿Por descanso? Puede que algunos. Pero el nivel de ausentismo es porcentualmente muy superior al de años anteriores.
Anzoátegui sólo cuenta con Gorkys Hernández. La Guaira tiene a Junior Guerra y desde esta semana a Luis Sardiñas, aunque Miguel Rojas prometió regresar. Lara únicamente a César Jiménez y Yoervis Medina.
La diferencia está en que los capitalinos tenían muchos más bigleaguers a elegir.
Llama la atención tantas ausencias: Carlos Pérez, Ramón Cabrera, Oscar Hernández, Miguel Socolovich, Eugenio Suárez, Franklin Gutiérrez, Asdrúbal Cabrera, Gregorio Petit, Felipe Rivero y Franklin Morales; y no incluyamos a Gerardo Parra, Carlos Carrasco o Héctor Rondón, de mayor peso específico en el norte.
Los Leones tienen capacidad de respuesta, si Alex González y Jesús Guzmán mantienen el paso y la rotación recupera la estabilidad. Esto último es clave y urgente. Pero las ausencias pesan y deberán ser parte del auto examen de finales de campaña, tanto de la gerencia como de los propios peloteros que no hayan venido o se vayan anticipadamente.
Queda una amarga coincidencia: el voto decisivo para cambiar el formato fue del Caracas. Sin esa mano alzada, hoy estarían peleando el primer lugar. Otro punto que habrá que evaluar.
Publicado en El Nacional, el miércoles 2 de diciembre de 2015.