El Emergente
Por Ignacio Serrano
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| José Pirela |
El cambio que llevó a José Pirela de los Yanquis de Nueva York a la costa oeste ha puesto a esos tres criollos en el dilema de competir unos contra otros, en busca de un cupo en el equipo grande.
Ya Alexi Amarista y Yangervis Solarte estaban allí. Desde mediados de 2014, cuando los propios Mulos del Bronx embarcaron a Solarte rumbo a California, los religiosos han hablado castellano al cubrir vacantes eventuales en casi cualquier posición.
¿Cabrán los tres en el roster de 25? ¿Es viable contar con tres jugadores en la banca con similares características?
Los equipos de la Liga Nacional suelen repartir así sus 25 puestos: ocho titulares al campo, cinco pitchers abridores, siete relevistas, un catcher suplente y un cuarto outfielder. Eso deja tres lugares, a completar con utilitys, tal vez un quinto patrullero o un bombero más.
Amarista es el único con habilidad natural para defender el short, lo que le da una ventaja. De hecho, fue el campocorto titular contra los lanzadores derechos durante buena parte de 2015, hasta que la sequía ofensiva le devolvió a su rol de sustituto.
El portocruzano tiene otras dos ventajas: es el más rápido de los tres, aunque Pirela también vuela, y es capaz de actuar en el centerfield con bastante eficiencia y alcance.
Amarista debería estar en el roster inaugural, salvo que sea cambiado durante el receso invernal. Su multifuncionalidad es un valor muy buscado en las mayores.
Solarte no es un convidado de piedra. Aunque corre menos y sus apariciones en las paradas cortas o el center se limitarían a emergencias, ha sido el mejor bateador de los tres.
El valenciano jugó a diario en 2015, aunque pasó de un lado a otro: 26 juegos en primera, 17 en segunda, 91 en tercera y 23 como emergente. En total, apareció en 152 compromisos, con una buena línea ofensiva de .270/.320/.428.
Esos números son muy buenos si eres súper utility. Solarte parece tener ganado su lugar. Como Amarista, él tiene algunas peculiaridades que hacen lo troca en un pelotero único y valioso para los californianos.
En medio de ese panorama aparece Pirela. Es obvio que los Padres están interesados en él, porque de lo contrario no habrían entregado a un joven lanzador como Ronald Herrera, todavía lejos de la gran carpa, pero con pesada recta y buenos pitcheos secundarios.
El trujillano es un jugador interesante. Tiene virtudes de Solarte y de Amarista. Es veloz y tiene algo de fuerza. Puede jugar en el cuadro y en las praderas exteriores. No es un torpedero, pero es esa la posición que más ha jugado en las granjas. Puede estar en el left y en el right. Últimamente ha sido probado en el center.
Pirela ha crecido como toletero. En triple A, de por vida, presenta una línea de .311/.362/.402, que no puede haber sido pasada por alto por posibles compradores.
El nativo de Valera deberá esperar a febrero, para tener más pistas. Pero parece tener ventaja en esta lucha fratricida que le ha tocado pelear.
Publicado en El Nacional, el viernes 13 de noviembre de 2015.