El Emergente
Por Ignacio Serrano
Lo decíamos en la columna de ayer, al recordar cómo llegó Yorman Rodríguez a los Bravos y cómo los tres peloteros que navegaron hasta la isla, incluyendo a Eliézer Alfonzo y José Osuna, están aportando a la reconstrucción del equipo en esta eliminatoria, en tanto que el Magallanes espera por Yusmeiro Petit y Jonathan Herrera.
Tienen vida propia, los cambios, y pueden parecer algo muy distinto al pactarse, al transcurrir un año y todavía más en el largo plazo.
Pensábamos en eso al escribir la columna sobre Rodríguez. Y pensamos también en el otro cambio que realizó Margarita por aquellas fechas. ¿Lo recuerdan?
Fueron varios, es verdad. Los insulares son el equipo más activo en el mercado desde hace tres temporadas. Hoy nos referimos específicamente al que llevó a Carlos Rivero a la isla, por Fernando Nieve. Los aficionados siempre preguntan quién gana en cada canje que ocurre. Y resulta que en este convenio entre neoespartanos y Leones ganaron los Cardenales.
Qué giros da el beisbol. Rivero ya despuntaba como un infielder con potencial ofensivo en el Caracas y los melenudos querían pitcheo. Yves Hernández, gerente general de los orientales, propuso el maridaje: el grandeliga Nieve iría a la capital y el toletero larense recalaría en Porlamar.
Si hay un cambalache capaz de hacer olvidar en la legión felina el episodio de Dilson Torres y Miguel Cairo, es este.
Nieves lanzó solo un ratico con los metropolitanos. Todavía pertenece al club, pero no se reportó en la campaña 2014-2015 ni en esta, aunque sí se sumó a la selección nacional de Luis Sojo para el torneo Premier 12.
Rivero fue el campeón jonronero de la temporada pasada y ya comenzó a soltar batazos en esta justa, incluyendo un encuentro de siete empujadas que empató el máximo registro en su franquicia.
El problema para los Bravos es que el barquisimetano ya no pertenece a aquella franquicia. En el ínterin fue a dar a los Cardenales en un nuevo convenio y ahora defiende al Lara, en su tierra natal.
Mario Martínez y el slugger Luis Jiménez fueron a dar al Stadium Nueva Esparta. César Hernández y Rivero pasaron al Antonio Herrera Gutiérrez.
Y entonces, ¿quién ganó el pacto de Rivero por Nieve?
La tropa de Henry Blanco todavía espera por Jiménez, el bateador zurdo con más jonrones en la historia de la LVBP. Llegó con retraso para la 2014-2015, por estar jugando en el Lejano Oriente, y aquejado de molestias físicas. No pudo rendir al nivel que lo hizo con los crepusculares.
El gigante de Bobare se operó una rodilla, parece haber perdido su forma física debido al paro obligado y está tratando de recuperar su mejor capacidad. De hecho, ahora anda en Asia, junto a Nieve, con la selección nacional. Mientras, Martínez todavía no ha crecido al nivel de las expectativas que había cuando dio el salto al profesional.
Hernández brilló en la 2014-2015 con Lara, y aunque hoy está fuera por problemas físicos, su compañero de canje, Rivero, ha hecho todo por remachar la buena fortuna aquí de los pájaros rojos.
Porque, sí, es un asunto de fortuna. Nadie hace un cambio pensando que está perdiendo. Todos entregan aquello que tal vez les sobra y buscan eso que tanto necesitan. El tiempo se encarga del resto.
Publicado en El Nacional, el sábado 7 de noviembre de 2015.