Max Scherzer, autor de dos juegos sin hit ni carreras esta temporada, expresó después de su segunda hazaña de 2015, este sábado, que confió plenamente en la conducción de su catcher Wilson Ramos y que, pese a dudar en ocasiones, siempre hizo los pitcheos que el venezolano le pidió, no los que él mismo quería.
"Confié en mi receptor. En un montón de ocasiones llamó algunos lanzamientos con los que yo no estaba seguro", declaró Scherzer a la agencia The Associated Press acerca de Ramos, quien se puso a sólo uno del récord de más no-hitters recibidos en las Grandes Ligas, al conseguir su tercero.
"Confié en él y lancé todo lo que me pidió", agregó el as de los Nacionales. "Y funcionó. Estábamos en sintonía. Estas cosas son especiales. Pero hacerlo dos veces en una temporada, Dios mío, eso no parece posible".
"Confié en mi receptor. En un montón de ocasiones llamó algunos lanzamientos con los que yo no estaba seguro", declaró Scherzer a la agencia The Associated Press acerca de Ramos, quien se puso a sólo uno del récord de más no-hitters recibidos en las Grandes Ligas, al conseguir su tercero.
"Confié en él y lancé todo lo que me pidió", agregó el as de los Nacionales. "Y funcionó. Estábamos en sintonía. Estas cosas son especiales. Pero hacerlo dos veces en una temporada, Dios mío, eso no parece posible".
Ramos está a un no-no de la marca absoluta para un careta en las mayores, que es de cuatro y pertenece a Jason Varitek y Carlos Ruiz, informó el Washington Post.
"Me siento muy feliz por el trabajo que hizo hoy y por los resultados que hemos conseguido juntos", soltó Ramos. "Él me gusta, porque confía en mí. No quiero decir que no me cambió algunos pitcheos hoy. Sí lo hizo. Pero cuando eso paso, nos mantuvimos en la misma página. Cuando él me dijo no a una recta, le pedí slider y eso era lo que él quería. Así fue la comunicación entre los dos".
"Antes del juego, hablamos de lo que queríamos hacer y decidimos ir con nuestro plan", continuó el carabobeño. "Eso es lo que nos gusta".